El impacto de los fardos y el desafío del suprareciclaje
En el ecosistema de la moda contemporánea, donde la novedad suele ser un barniz para la obsolescencia, la propuesta de 12NA se ofrece como una disección necesaria. En el marco de la inauguración de 3m3rg3exe en Microgalería (Loyola 514, Villa Crespo), hablamos con Mariano Breccia, quien junto a Mechi Martínez gestaron una de las narrativas de upcycling más coherentes de la región, sobre una realidad que la industria prefiere ignorar: la metamorfosis de la ropa usada en un nuevo tipo de residuo colonial.
Geografía del Exceso
La conversación se aleja de la estética para entrar en el terreno de lo visceral. Al indagar sobre el fenómeno de los fardos de ropa al por mayor que hoy saturan el mercado argentino, la respuesta de Breccia es un cachetazo de realismo y dice que “ La gente del Oeste del Gran Buenos Aires ya lo instaló. La ropa no es tan barata pero es barata y el tema es que lo que no se vende, se tira. Pero no se tira en un lugar sino en todos los lugares. La foto del Desierto de Atacama es totalmente tendenciosa porque todo Chile está así. Hay microbasuralles en todos lados, a ustedes les espera un desastre.”
Esta "estética del desastre" no es una abstracción. Es el resultado de un modelo que confunde circularidad con acumulación. Para Breccia, la falla es estructural y de volumen; una matemática del desperdicio que no permite eufemismos: “El negocio de la ropa usada es volumen: el 30% de la ropa usada no sirve (porque tiene fallas, está rota o manchada) entonces va a la basura. Si no regulan la entrada de ropa usada, no sirve y es necesario un cambio sistémico”.
Arqueología de la Identidad: Del Estadio a la Galería
Frente a esta avalancha de lo superfluo, la exhibición 3m3rg3exe se presenta como un ejercicio de precisión y memoria. La pieza central es la camiseta de fútbol, ese tótem de la identidad argentina, aquí deconstruida por 12NA y ensamblada nuevamente por manos de mujeres migrantes. No es solo costura; es una redistribución del valor.
El aprovechamiento del material es total, casi obsesivo. Los sobrantes de estas camisetas (su precio es de usd 100) fue transmutado en una serie de pañuelos que portan la iconografía de Maradona, una propuesta que ya tuvo su validación en la feria Tranoï de París el pasado octubre. Aquí, el residuo no es el final, sino la materia prima de una nueva mitología textil.
El Diálogo entre el Álbum y el Algoritmo
La muestra es, en esencia, una paradoja temporal. Con un gesto analógico, Mariano pasa los folios de un antiguo álbum de fotos donde habita la producción realizada con AI; pues la exposición propone una inmersión en la frontera digital.
“La experiencia VR te muestra el impacto de la industria de la moda en el medioambiente y además podes ver nuestro taller y cómo colaboramos con las mujeres migrantes. También hay un código QR que te lleva al probador virtual”, explica Mariano.
En esta intersección, donde la crudeza de los microbasurales convive con la sofisticación de la Inteligencia Artificial y la mano de obra migrante, se define el nuevo lujo: uno que no se mide por la exclusividad del material, sino por la profundidad de su ética y la transparencia de su sintaxis.
En un mundo que se ahoga en ropa, 12NA nos recuerda que el diseño, si no es sistémico, es simplemente más ruido.
La exhibición 3m3rg3exe se puede visitar todo el mes en Microgalería.


