La reivindicación de la seda: GONE presentó Superficies ilusas en desfile teatral
"Anoche estuve en el reino de las Sombras, donde rayos grises del sol atravesaban un cielo gris”, escribió en 1896 Maximo Gorkin para describir la sensación como espectador en la primera proyección del Cinematógrafo Lumière. ¿Puede trasladarse ese sentimiento a un desfile? Y, sí. En épocas apuntaladas en el impacto visual y contenidos express, pero la misma donde el arte contemporáneo se viste de las diferentes disciplinas para contar una historia.
Noches atrás, GONE montó su cuarto desfile. Teatral, efímero, dramático. ¿Qué estamos describiendo? Vestidos diseñados a partir de las sedas, que están arrugadas, drapeadas, anudadas, y se van corporizando en diferentes siluetas que parecen cobrar vida en el andar de las modelos, que por momentos parecían que iban a chocarse en la caminata, mientras otras tantas fluían etéreas al doblar alrededor de unos velos armados en LABA, en el barrio de Chacarita.
La nueva colección de GONE se llama Superficies ilusas y sirvió de base para mostrar el avance del programa estético de la marca. La noción del lujo sensible corporizado en la seda para prendas habitadas en un uso cotidiano, ahora se encuentran con un temperamento escultórico. El lenguaje de las artes escénicas buscaba su entorno en la belleza, el drama y las emociones humanas. Cierra un vestido rojo endemoniado y la melodía Bad Romance, de Lady Gaga, mientras GONE - Gonzalo Andrade - y su equipo saludan. De la camisa del diseñador y fundador cuelga un pedazo de seda con la frase Industria Nacional, más que un manifiesto, se siente como una plegaria. Del desgarro sale la esperanza. Aquí las pruebas.
imágenes: Gentileza Gone